sábado, 30 de marzo de 2013

230.


Está comprobado, cuando me hacen daño me enfado, lloro. Después me quedo en un estado catatónico del cual ni tu sonrisa puede sacarme. Y no siento, no siento absolutamente nada. Aprieto los dientes, me duelen pero sigo haciéndolo. Me siento en la cama, subo las medias y miro las botas. Paso así horas y horas, respiro hondo, masajeo las sienes. Fumo un cigarro. No puedo más, con la mente en blanco y el alma vacía, aprieto el gatillo y mancho las paredes. Las tiño de rojo, ese cerebro que todos opinaban que no usaba para nada forma manchas extrañas sobre la habitación. Y la sombra de lo que fui se diluye lentamente con el ambiente, y desaparezco en silencio de vuestras vidas. Huyo de los insultos, de sus manos posesivas tocando mi cuerpo, huyo de ti también, mi amor, que jamás supiste quererme ni quisiste entenderme. Adiós papá, fuiste el más inteligente de todos, desapareciste antes de verme crecer.

miércoles, 27 de marzo de 2013

229.

Por mis chicos y por mis chicas. Por Helena, por Sebas y Natalia, por Marila,por Manu, por Laura, por Luis, y por la madre que los parió a todos. Por hacer más divertido cada día de la semana, por hacer mi vida un poco menos aburrida. Por darle color a esas paredes tan grises, por estar ahí. Por las tardes viendo pelis, tirados pasando frío, por los abrazos, los paseos largos. También está María, Ángela, Fer, Irene, Rubén, y muchos más. Ellos son mi familia, la razón por la cuál me levanto cada día, por ellos lucho hasta quedarme sin aliento. Y esas personitas se merecen todo, lo que yo puedo darles y mucho más porque da igual lo insoportable que esté ese día o el tiempo que llevemos juntos, ellos no fallan nunca.

228.

Just not enough. Esa soy yo, sin dar la talla. Nunca lo hago. Decepcionando a todos los que quiero. Rompiendo las reglas, cagándola. Sin dejar que nadie me conozca, que nadie me cuide, que nadie me quiera. Sin querer yo a nadie, sin poder amar, porque sé que acabará mal y termino yéndome antes de que todo se destruya. Demasiado gorda, demasiado tonta; quizás, pensando demasiado las cosas. Escondiéndome en el baño y viendo tus fotos una y otra vez. Torturándome. Sin mirarme en el espejo para no morir de asco. Pensando si, alguna vez, te paras a pensar "Joder, la echo de menos". Porque yo te echo de menos todos los putos días. Que está claro que si estoy sola es por mi culpa, por construir murallas en vez de puentes para que los demás puedan acceder a mi. Pero que más dan las razones? Yo, por mucho que piense en las mías, no soluciono nada.

227.

Si me estoy muriendo, no me lo digas. Porque quiero hacerlo a tu lado. 

domingo, 24 de marzo de 2013

226.


Que pasa cuando desapareces de entre mis sábanas? Cuando no secas mis lágrimas y me besas? Lo que pasa es que me tiro en la cama a llorar hasta que me duelen los ojos, que destrozo cosas hasta que no queda nada entero, que me arranco el corazón y te lo mando envuelto en papel celofán. Ocurre que por mucho que la quieras a ella, que no te importe una mierda lo nuestro, que me utilizaras simplemente como "vía de escape", no hay nada que eche más de menos en este mundo que abrazarte. Que acariciarte. Que besarte en la mejilla y sonreír cuando me doy cuenta de que me quedo embobada mirándote. A ti, probablemente ni te afecte pero cada vez que te pierdo, me pierdo a mi misma también.

jueves, 21 de marzo de 2013

225.


La palma de su mano en mi espalda, derritiendo desde ahí mi corazón. Cierro los ojos y grabo cada segundo de este abrazo. El olor de su pelo, el tacto de su mejilla contra mis labios. Su voz susurrándome al oído. No aguanto más, creo que me va a estallar la cabeza. El oro de sus ojos me hechiza y no hay nada que necesite más que amarlo en este momento. Pero tras un tiempo quietos, nos separamos y sin saber cómo me decido a entrar en el portal y subir a mi casa, sin estropear nada, haciendo las cosas bien. No soy capaz y cuando apenas había dado un paso atrás, vuelvo y me tiro a sus brazos, lo aprieto tanto que podría matarlo y ni siquiera ser consciente. Lo beso y siento que nuestros cuerpos se combinan, se unen y somos el triple de fuertes. Somos invencibles, perfectos cuando estamos juntos. Y no hay nada que se compare a eso, a ese sentimiento, a tus labios, a tu risa, a tu forma de mirarme y decirme todo sin decir nada. Simplemente, no hay nada que se compare a ti. Ni a nosotros.

domingo, 17 de marzo de 2013

224.

Cuida tus palabras, chico. Nunca sabes por lo que pasan los demás, y aunque lo supieras, nada justifica tus actos. La gorda, la puta, el pringado, el maricón, la friki, la marimacho, el que tiene pluma,... No tienen por qué soportar tu retraso mental. Que te creas superior al resto del mundo, es tu problema y no debes pagarlo con aquellos que sólo desean pasar inadvertidos, sólo piden que los dejes en paz. Y cuidado, pequeño saltamontes, igual un día se cansan de callar y mirar para abajo y se levantan en tu contra.

223.


Ahora es cuando me pregunto si no será cierto que todo lo que hicimos no estuvo mal. Es decir, que fue lo correcto. El hecho que me hace plantearme lo contrario es que mi abuelo siempre decía que el camino más fácil es el erróneo, y, sin duda, es infinitamente fácil perderse entre tus besos y caricias. Pero, y si, por una vez el que se equivocase fuera el? Y si resultara que por fin tengo algo bueno en esta vida? Agh, de tanto pensar me duele la cabeza. Realmente, no sé por qué le doy tantas vueltas a esto, esté bien o mal, lo haré igual porque eso ayuda a cuidarme. Y, lo primero ahora, es mantenerme con vida, unos años más. Sólo quiero, unos años más para buscarlo, si fallo otra vez, terminaré con todo. Está decidido, por lo de pronto, disfrutar del momento porque, quién dice que no seas tú eso que me falta? Esa pieza perdida de mi puzzle. Sobretodo, quién me va a negar que te quiero, que cada momento a tu lado es perfecto. Quién será capaz.

jueves, 14 de marzo de 2013

222.

Y al final estás solo, con la copa en la mano y mirando el paisaje desde la ventana. Todo lo que dabas por supuesto, lo que querías que pasara, se ha derrumbado. Y sólo puedes secar tus lágrimas y levantar bien arriba la cabeza, disimular que te duelen las heridas y seguir peleando hasta morir. Tienes que superarlo porque realmente, no te queda otra opción, el mundo no para y espera a que te recuperes cuando una zorra te da una gran patada en el culo, no! La tierra sigue girando, las horas pasan, la gente nace, muere, sobrevive! Así que, vamos chaval, espabila! Vete a por ella en vez de quedarte quieto admirando las tonalidades de las nubes, ya pensarás luego en las consecuencias.

221.

La yema de mis dedos acariciaba tu espalda, casi quemaba pero era tan suave que no podía dejar de hacerlo. De vez en cuando abría los ojos y comprobaba que no eras un sueño, o un espejismo creado para ponerme mala pero cada vez que lo hacía seguías tumbado en mi cama. Y yo sonreía viendo tu gesto al apartar el pelo de la cara, y me perdía observando tus labios y sus múltiples y sabrosas perspectivas. Cuando cerraba los ojos mi cerebro representaba en mi cabeza lo que me gustaría que pasara, y tú te acercabas y me besabas, y todo desaparecía pero según me parecía a mi, mi momento se había pasado, y tú habías pasado página hacía ya un tiempo. Mientras me resignaba a mi destino y me metía en mi mundo de sueños e ilusiones rotas, tu dedo pulgar recorrió mi cara, terminando en el mentón y acariciando mis labios. En un parpadeo, estabas apretando tus labios contra los míos, al siguiente, te habías apartado. Volvías a mirarme, serio cuando estabas en mis ojos, sonriente cuando recorrías mi cara y mis mejillas. Me colocaste un pelo y abriste la boca como si fueras a decir algo pero terminamos besándonos una y otra vez. No dijiste nada importante, aunque nos entendimos perfectamente. Morí y renací esa noche, cuando, a oscuras, me robaste el corazón y el alma. 

jueves, 7 de marzo de 2013

220.

Es el momento de sacar la pistola y disparar, de levantar el culo del sofá y salir a protestar. Ahora que nos dan la oportunidad de dar nuestra opinión, de hablar, incluso aunque no nos escuchen y les dé igual. Más nos vale juntarnos y luchar, luchar por nuestros derechos y por nuestros deberes. Parece que no sirve para nada, que jamás conseguiremos lo que ansiamos pero sabéis qué? Si los de abajo nos movemos, los de arriba, se caen.

lunes, 4 de marzo de 2013

219.

 Abracadabra, te quiero. 

218.


Estaban cortando la hierba a unos metros de nosotros y el penetrante olor se mezclaba con el de mi pitillo antes de entrar por mi nariz. El sol acariciaba mis hombros desnudos y mis mejillas ligeramente coloradas. Gracias a esa luminosidad de verano podía ver a través de mis párpados. Era un jueves, o un viernes, no lo recuerdo bien, sobre las diez de la mañana. Tenía la cabeza apoyada en el regazo de una de las mejores personas que he conocido jamás. Amy Winehouse enlatada cantaba desde mi móvil y yo, feliz, empecé a cantar con ella. De un día para otro me quedé sola, y volví a ser la puta que se iba con el primer tío que encontraba porque creía que podía engañarme a mi misma y hacer pasar a esos calentones por hombres realmente enamorados de mi. Volviendo a mi relato de los hechos aquel día acontecidos; me bebía un café frío mientras fumaba y decía tonterías simplemente por hacer reír a Carlos, y sus ojos, habitualmente pardos, rozaban el verde cuando me miraba, girado, y le daba el sol en la cara. Recuerdo también el tacto de sus labios en mi mejilla y su mano en mi espalda cuando empezamos a bailar simplemente porque nos apeteció en aquel momento. Fui feliz. Aquel día, olvidándome por un par de horas de todo, y dejando atrás mis múltiples problemas, me escapé a algún lugar un poco menos malo.

domingo, 3 de marzo de 2013

217.

Y en el rechazo a la sociedad que a su vez nos rechazaba, nació una de las amistades más fuertes de este planeta y un par más. Por la decadencia conjunta y la alegría repentina, que aunque parezca que no, unen. Casi tanto como compartir tarta, cantar canciones juntas y prestar la una a la otra los libros. Puede ser que las tardes de cine, los silencios elocuentes y las palabras calladas, consiguieran unir nuestras almas. No lo sé aún. Pero, después de tantos años de amistad, siendo sincera, lo único que me importa es que esa sentimental y mona bolita de pelo rubia sobre longboard me sigue queriendo. Que siga conservando la saltarina de colores que le regalé en verano, la Vespa de juguete por su quince cumpleaños, cada una de las sonrisas, de los abrazos. Me importa que cuando escucho Pete Doherty, en mi cabeza es ella la que está bailando en su habitación, o leyendo tirada en el sofá. Lo que más me gusta de ella no es su mirada concentrada cuando escucha mis problemas, ni su risa cuando hago una broma, ni la graciosa forma de fruncir el ceño cuando no entiende algo... Aunque esos detalles me pongan de muy buen humor, lo que realmente hace que la adore, es su forma de respetarse a si misma y a los demás, su no-odio, su cariño hacia todo el mundo, su inocencia, que a veces me desespera pero es un rasgo que ojalá persistiera en mi también. Así que si lees esto, H., no hay nadie como tú, ni lo habrá jamás. 
Pdt: Espero que te fijes en que está justificado, porque te parece más mono. Tu lo vales mi pequeña, sonríe hasta que te duelan los músculos de la cara.