miércoles, 10 de julio de 2013

246.

De pie, mientras te esperaba, pasaban demasiadas personas a mi alrededor y ni una se parecía a ti. Daba caladas regulares a mi cigarro mientras me cabreaba conmigo misma por haber olvidado los cascos en casa. Debí haber previsto que no pensabas venir, que una vez más sólo jugabas conmigo, que por mucho que me esforzara no conseguiría ser para ti algo más que un molesto mosquito. Al final no sirvió de nada pasarme una hora maquillándome, escogiendo la ropa adecuada, depilándome, pintando las uñas para que me vieras atractiva, quizá un poco más adulta y madura de lo que realmente soy. Aunque acabe llorando como cuando era pequeña y mi madre me sacaba la piruleta. Daba igual lo fuerte que lo intentara, las ganas que le pusiera, supongo que siempre estaría sola. Y en ese momento sentía que me incapacidad para mantener a la gente que quiero a mi lado crecía rapidamente. 

sábado, 29 de junio de 2013

245.


Te recuerdo solo, en el medio del silencioso pasillo. De pie y mirándome a los ojos mientras me acercaba a ti. Al contrario que el resto, no hiciste una sola pregunta, supongo que no te interesaban esos detalles morbosos. Abriste los brazos y me envolviste con ellos, tenía frío hasta que lo hiciste y ni siquiera me había dado cuenta. Tenía ganas de llorar, y no era capaz, hasta que me abrazaste. "Tranquila, pequena, tranquila" Pero tus brazos robustos y fuertes me recordaban a los suyos cuando subía los cuatro pisos corriendo para saltar encima de él. Ni siquiera sabía que hacer, tenía mucho miedo, aún era pequeña y no era consciente del todo de qué iba a pasar. Por eso todos los años siguientes a la muerte de mi abuelo, pedí que volviera, con estrellas fugaces, con las uvas en fin de año, con un trébol de cuatro hojas... Tú lo sabías, eras el único, más mayor que yo, me mirabas con tristeza, yo te sonría desde abajo y muchas veces te decía que confiaras. Después de una complicada pre-adolescencia y pasando aún la adolescencia en sí, es probable que haya dejado de creer en Peter Pan y en que vuelva aquí. Ahora que, ya no estáis a mi lado, me siento tan débil como una ramita en medio de una tormenta, y deseo tanto volver a ese pasillo en segundo de primaria donde nuestras almas se unieron en abrazo y conectaron. Quiero sentir el calor de las palmas de tus manos en mi espalda, que me beses el flequillo y me tranquilices susurrándome en la espalda porque, y si no puedo con esto? y si no puedo seguir? y si me quedo a medio camino?

lunes, 24 de junio de 2013

244.


Un puto pitido constante en los oídos, desesperación que corre por mis venas. Ganas de lanzarme a tu cuello y agarrarlo con todas mis fuerzas, de sentir cómo dejas de bombear sangre. Puta zorra de mierda, vaca gorda. No haces nada bien y me desespero. Ojalá pudiera luchar contra el puto espejo. Con mi reflejo, con la sombra que me persigue allá donde voy. `Maldita sea chica, otra vez metida en esa mierda hasta las cejas.´ Los ojos hinchados después de noches y noches seguidas llorando, más sola que la una. Por probar fortuna, caí en esa droga que es un maldito odio interno. Que alimento continuamente, que me ahoga, que es lo único que no me abandona.

243.



Un impulso de borrarlo todo, de quemar cada una de nuestras fotos. De bajar las escaleras y correr lo más rápido que pueda por la carretera. De arrancarme el corazón para que deje de latir, odio ese sonido, me explota en los oídos. Unas ganas enormes de ir a un bar y pegar al primero que vea, ganar o perder da igual, sólo escapar. Liberar esa rabia que llevo metida tan adentro, que me corroe. Que me posee si me despisto un momento y acabo recogiendo cristales rotos por el suelo, intentando no mirarme en cada uno de mis reflejos. Por no verme, por no tener que soportarme más, cogí la punta afilada y me abrí las muñecas. Que fácil era, abuelo, en un rato voy ahí arriba, a tu lado.

miércoles, 15 de mayo de 2013

242.

Bueno, esta entrada es única y exclusivamente para enseñaros esta camiseta. La diseñé yo y la llevé a la realidad, en fin, que estoy muy orgullosa de mi misma. Ver mi trabajo así, es genial, lo mismo me pasa con este blog. Bueno, espero que os guste, tanto la camiseta como el blog. Besitos demoníacos a todos!

domingo, 12 de mayo de 2013

241.


Porque cuando las lágrimas corrieron por mis mejillas, te fuiste corriendo tu también. Cuando me doblé sobre el váter, dijiste "Limpia luego" y te encerraste en la habitación. Por no escuchar cuando intentaba explicarte mi dolor. Por gritarme cuando te pedía que me abrazaras. Porque jamás creíste en mi, y conseguiste que yo tampoco lo hiciera. Que querías, madre? Que te perdonara? Cuando te des cuenta será demasiado tarde, yo habré crecido y me habré cansado de tus órdenes, de tus castigos, de tus gritos, de tus bofetones. No soportaré más tus gemidos por las noches, tus copas, las mañanas desayunando sola, limpiando sola, planchando, haciendo camas, sacando polvo, haciendo todo. Porque ya no tendré que hacerlo. Y créeme, mamá, cuando te digo que el día que salga por esa puerta, no volveré a pisar tu casa.

lunes, 6 de mayo de 2013

240.

Y lo perfectos que éramos?

239.

Saca las espinas a las rosas que me regalas, aparta de mi a la gente mala. Estoy perdida, abuelo, ahora la única luz que me ilumina es la luna. Sabes que hablo contigo todas las noches, porque de pequeña me dijiste "Cuando no esté, mira al cielo y en la estrella que brille más fuerte estaré para escucharte". Y yo lo intento, pero creo que no puedo, quiero volver a sentarme en tu regazo para que me cures las heridas con besos mágicos, para que me tranquilices con la llama de tu mechero. No soy capaz de sacar la familia adelante, de unirlos como tú hacías. Te echo tanto de menos... Y no llega ir a verte una vez al año, llevarte una rosa a la tumba de mármol, para qué? para que se pudra contigo? Estoy muy sola sin ti.

miércoles, 1 de mayo de 2013

238.


Me dolían las rodillas, me quemaba la garganta pero una vez más me inclinaba sobre el váter. Y lo echaba todo, mis mil demonios. Mientras mi eye-liner se suicidaba por mis mejillas, mi cabeza daba vueltas sobre mis hombros. "Que fea eres, joder. Échalo todo gorda de mierda. Puta barata, no sirves para nada. Comes y comes y luego te arrepientes." Las voces me gritaban en la cabeza, no podía callarlas, no podía parar de llorar. El único que me hacía sentir bien estaba muerto y "joder, abuelo, si me ves ahora, lo siento". Por qué tenía que ser perfecta? Delgada, lista y guapa. Vomitando la sangre que compartíamos. Ven y sálvame por favor, yo ya no sé cómo salir de este agujero.

martes, 30 de abril de 2013

237.

Tú, el Sol. Yo, la Luna. Eternamente separados.

236.


Es ahora cuando me planteo la sinceridad de tus palabras o, en su defecto, la duración de las mismas. De qué vale un "te quiero" si dura sólo una noche? De qué valen tus caricias cuando al rato desaparecen? Para qué mirar las formas en las nubes? Se deshacen. Y los pétalos de las rosas que me regalaste, se marchitaron hace semanas. No sabes mirar en mis ojos, leer mi silenciosa petición "Ven y abrázame" te suplico, y mientras tú me vuelves la espalda y te vas. Llueve sobre mis mejillas al tiempo que te alejas, "Cuando volverás?" te pregunto, y sin parar siquiera me respondes que me llamarás pronto. Pero volví a aquel banco todos los días de mi vida, a las 5:00 de la tarde y jamás recibió tu llamada mi pobre alma desolada. Así que, en esta carta te digo, mi querido amor juvenil, de qué sirven esas mentiras, esas falsas esperanzas? Qué conseguiste yéndote de madrugada? Ahora yo me planteo la sinceridad de tus palabras o, en su defecto, la duración de las mismas.

235.

¡YA BASTA!- gritó algo en mi interior- Por favor, para ya. Lucha contra tus demonios, quiérete. Eres más guapa de lo que crees, más lista, menos gorda de lo que piensas. No te odies, te lo suplico. Deja de hacerte daño, no sigas con esto... Acabarás matándote, soy sólo tu sombra pero, por favor te pido que termines ahora que puedes. Porque ya basta, ya te has hecho demasiado daño. Ha llegado a un punto en el que sé que cuesta pero debes hacerlo. Yo te quiero, y eso significa que en tu interior te quieres, aunque no quieras verlo. Sé que es más fácil tirar la toalla y autocastigarte pero, no es lo mejor. Tú lo sabes. Para, por favor, para antes de que sea tarde. Ya basta.

viernes, 19 de abril de 2013

234.


Te regalé trocitos de mi, el resto me los robaste entre bastidores. Te regalé mil lágrimas y un millón de sonrisas. Escondiéndonos del mundo, metiéndonos en el nuestro. Y me dejaste vacía, y te eché de menos, incluso cuando tus "te quiero" sonaban a mentira. Hoy me peleo con las sábanas de esa cama que parece más grande desde que no estás tumbado a mi lado. Que tu sonrisa ya no ilumina mi vida y todo parece caer muy bajo, y yo me hundo en mis sueños. Porque es más fácil cerrar los ojos y dejarme ir que abrirlos para ver como se destruye todo y no poder hacer nada.

sábado, 6 de abril de 2013

233.

Quiero dormirme a tu lado, abrazados. Hoy y el resto de mis días. Quiero hacerte el amor hasta caer rendida, acariciarte el pelo siempre que me apetezca. Besar las cicatrices de tu espalda, tus labios, cada centímetro de tu piel, susurrarte al oído "I don´t want to miss a thing". En la oscuridad, sintiendo tu corazón latiendo bajo la palma de mi mano, que me coloques un mechón de pelo. Sentir otra vez que el mundo es nuestro completamente, que no nos importe absolutamente nada más. Pensar que eres el único que puede sacar esto de mi interior, que cuando cierro los ojos veo tu sonrisa reluciendo entre las sábanas, la forma de tus músculos, tu olor, el tacto de tu piel contra mis labios... Aunque al abrirlos, lo único que siento es la humedad de las lágrimas en mis mejillas el simple recuerdo de tus brazos rodeándome, ojalá pudiera quedarme atrapada en aquella noche eternamente, cuando el mundo dejó de girar durante un par de horas y fue nuestro, cuando nuestras almas se unieron... Pero que lejos parece todo eso ahora, casi todo desapareció de tu cabeza y a mi me aterra que olvides lo que somos juntos, en lo que podríamos convertirnos.

viernes, 5 de abril de 2013

232.

Se apagaron las luces de la sala pero no guarda esperanzas, al fin y al cabo es su culpa que todo haya terminado. Decidió hablarle enfadada y deprimida, y la cagó hasta el punto de decirle que no podían seguir así, que no daba para más. Pero ahora era consciente de que podía con mucho más, pero era tarde, tarde, tarde, muy tarde.... Sólo podía cerrar los ojos y lamentarse, y en eso estaba cuando de repente unos brazos la rodearon con fuerza y unos rizos negros le rozaron la mejilla. Y el chico que hace dos minutos estaba a unos pasos de ella, estaba ahora abrazándola. No entendía nada y se quedó bloqueada un momento hasta que decidió aprovecharlo y lo hizo, aunque quedó con las ganas de besarle quizá en otro momento, quizá en ninguno. Quién sabe...

jueves, 4 de abril de 2013

231.

-Sé que hace sólo dos años que nos conocemos, lo sé. Pero hemos pasado una guerra juntos y sé que si superamos todos esos obstáculos, estoy segura de que podemos superar lo que nos pongan por delante. Lo veo en tu sonrisa, en tus ojos... Sí, somos aún demasiado jóvenes pero te quiero, te quiero con cada fibra de mi ser. Por todo esto Martín Vázquez Varela te pido, mi amor, que te cases conmigo. Te amaré hasta el día de mi muerte, y probablemente incluso después de eso te amaré locamente. Como hago desde el día en que te conocí, cuando estabas tirado en el suelo del parque dibujando, me miraste y sonreíste, como hice durante estos años aunque intentara disimularlo al principio. Créeme cuando te digo que no hay absolutamente nada que quiera más que pasar la vida a tu lado, nada excepto tú.

sábado, 30 de marzo de 2013

230.


Está comprobado, cuando me hacen daño me enfado, lloro. Después me quedo en un estado catatónico del cual ni tu sonrisa puede sacarme. Y no siento, no siento absolutamente nada. Aprieto los dientes, me duelen pero sigo haciéndolo. Me siento en la cama, subo las medias y miro las botas. Paso así horas y horas, respiro hondo, masajeo las sienes. Fumo un cigarro. No puedo más, con la mente en blanco y el alma vacía, aprieto el gatillo y mancho las paredes. Las tiño de rojo, ese cerebro que todos opinaban que no usaba para nada forma manchas extrañas sobre la habitación. Y la sombra de lo que fui se diluye lentamente con el ambiente, y desaparezco en silencio de vuestras vidas. Huyo de los insultos, de sus manos posesivas tocando mi cuerpo, huyo de ti también, mi amor, que jamás supiste quererme ni quisiste entenderme. Adiós papá, fuiste el más inteligente de todos, desapareciste antes de verme crecer.

miércoles, 27 de marzo de 2013

229.

Por mis chicos y por mis chicas. Por Helena, por Sebas y Natalia, por Marila,por Manu, por Laura, por Luis, y por la madre que los parió a todos. Por hacer más divertido cada día de la semana, por hacer mi vida un poco menos aburrida. Por darle color a esas paredes tan grises, por estar ahí. Por las tardes viendo pelis, tirados pasando frío, por los abrazos, los paseos largos. También está María, Ángela, Fer, Irene, Rubén, y muchos más. Ellos son mi familia, la razón por la cuál me levanto cada día, por ellos lucho hasta quedarme sin aliento. Y esas personitas se merecen todo, lo que yo puedo darles y mucho más porque da igual lo insoportable que esté ese día o el tiempo que llevemos juntos, ellos no fallan nunca.

228.

Just not enough. Esa soy yo, sin dar la talla. Nunca lo hago. Decepcionando a todos los que quiero. Rompiendo las reglas, cagándola. Sin dejar que nadie me conozca, que nadie me cuide, que nadie me quiera. Sin querer yo a nadie, sin poder amar, porque sé que acabará mal y termino yéndome antes de que todo se destruya. Demasiado gorda, demasiado tonta; quizás, pensando demasiado las cosas. Escondiéndome en el baño y viendo tus fotos una y otra vez. Torturándome. Sin mirarme en el espejo para no morir de asco. Pensando si, alguna vez, te paras a pensar "Joder, la echo de menos". Porque yo te echo de menos todos los putos días. Que está claro que si estoy sola es por mi culpa, por construir murallas en vez de puentes para que los demás puedan acceder a mi. Pero que más dan las razones? Yo, por mucho que piense en las mías, no soluciono nada.

227.

Si me estoy muriendo, no me lo digas. Porque quiero hacerlo a tu lado. 

domingo, 24 de marzo de 2013

226.


Que pasa cuando desapareces de entre mis sábanas? Cuando no secas mis lágrimas y me besas? Lo que pasa es que me tiro en la cama a llorar hasta que me duelen los ojos, que destrozo cosas hasta que no queda nada entero, que me arranco el corazón y te lo mando envuelto en papel celofán. Ocurre que por mucho que la quieras a ella, que no te importe una mierda lo nuestro, que me utilizaras simplemente como "vía de escape", no hay nada que eche más de menos en este mundo que abrazarte. Que acariciarte. Que besarte en la mejilla y sonreír cuando me doy cuenta de que me quedo embobada mirándote. A ti, probablemente ni te afecte pero cada vez que te pierdo, me pierdo a mi misma también.

jueves, 21 de marzo de 2013

225.


La palma de su mano en mi espalda, derritiendo desde ahí mi corazón. Cierro los ojos y grabo cada segundo de este abrazo. El olor de su pelo, el tacto de su mejilla contra mis labios. Su voz susurrándome al oído. No aguanto más, creo que me va a estallar la cabeza. El oro de sus ojos me hechiza y no hay nada que necesite más que amarlo en este momento. Pero tras un tiempo quietos, nos separamos y sin saber cómo me decido a entrar en el portal y subir a mi casa, sin estropear nada, haciendo las cosas bien. No soy capaz y cuando apenas había dado un paso atrás, vuelvo y me tiro a sus brazos, lo aprieto tanto que podría matarlo y ni siquiera ser consciente. Lo beso y siento que nuestros cuerpos se combinan, se unen y somos el triple de fuertes. Somos invencibles, perfectos cuando estamos juntos. Y no hay nada que se compare a eso, a ese sentimiento, a tus labios, a tu risa, a tu forma de mirarme y decirme todo sin decir nada. Simplemente, no hay nada que se compare a ti. Ni a nosotros.

domingo, 17 de marzo de 2013

224.

Cuida tus palabras, chico. Nunca sabes por lo que pasan los demás, y aunque lo supieras, nada justifica tus actos. La gorda, la puta, el pringado, el maricón, la friki, la marimacho, el que tiene pluma,... No tienen por qué soportar tu retraso mental. Que te creas superior al resto del mundo, es tu problema y no debes pagarlo con aquellos que sólo desean pasar inadvertidos, sólo piden que los dejes en paz. Y cuidado, pequeño saltamontes, igual un día se cansan de callar y mirar para abajo y se levantan en tu contra.

223.


Ahora es cuando me pregunto si no será cierto que todo lo que hicimos no estuvo mal. Es decir, que fue lo correcto. El hecho que me hace plantearme lo contrario es que mi abuelo siempre decía que el camino más fácil es el erróneo, y, sin duda, es infinitamente fácil perderse entre tus besos y caricias. Pero, y si, por una vez el que se equivocase fuera el? Y si resultara que por fin tengo algo bueno en esta vida? Agh, de tanto pensar me duele la cabeza. Realmente, no sé por qué le doy tantas vueltas a esto, esté bien o mal, lo haré igual porque eso ayuda a cuidarme. Y, lo primero ahora, es mantenerme con vida, unos años más. Sólo quiero, unos años más para buscarlo, si fallo otra vez, terminaré con todo. Está decidido, por lo de pronto, disfrutar del momento porque, quién dice que no seas tú eso que me falta? Esa pieza perdida de mi puzzle. Sobretodo, quién me va a negar que te quiero, que cada momento a tu lado es perfecto. Quién será capaz.

jueves, 14 de marzo de 2013

222.

Y al final estás solo, con la copa en la mano y mirando el paisaje desde la ventana. Todo lo que dabas por supuesto, lo que querías que pasara, se ha derrumbado. Y sólo puedes secar tus lágrimas y levantar bien arriba la cabeza, disimular que te duelen las heridas y seguir peleando hasta morir. Tienes que superarlo porque realmente, no te queda otra opción, el mundo no para y espera a que te recuperes cuando una zorra te da una gran patada en el culo, no! La tierra sigue girando, las horas pasan, la gente nace, muere, sobrevive! Así que, vamos chaval, espabila! Vete a por ella en vez de quedarte quieto admirando las tonalidades de las nubes, ya pensarás luego en las consecuencias.

221.

La yema de mis dedos acariciaba tu espalda, casi quemaba pero era tan suave que no podía dejar de hacerlo. De vez en cuando abría los ojos y comprobaba que no eras un sueño, o un espejismo creado para ponerme mala pero cada vez que lo hacía seguías tumbado en mi cama. Y yo sonreía viendo tu gesto al apartar el pelo de la cara, y me perdía observando tus labios y sus múltiples y sabrosas perspectivas. Cuando cerraba los ojos mi cerebro representaba en mi cabeza lo que me gustaría que pasara, y tú te acercabas y me besabas, y todo desaparecía pero según me parecía a mi, mi momento se había pasado, y tú habías pasado página hacía ya un tiempo. Mientras me resignaba a mi destino y me metía en mi mundo de sueños e ilusiones rotas, tu dedo pulgar recorrió mi cara, terminando en el mentón y acariciando mis labios. En un parpadeo, estabas apretando tus labios contra los míos, al siguiente, te habías apartado. Volvías a mirarme, serio cuando estabas en mis ojos, sonriente cuando recorrías mi cara y mis mejillas. Me colocaste un pelo y abriste la boca como si fueras a decir algo pero terminamos besándonos una y otra vez. No dijiste nada importante, aunque nos entendimos perfectamente. Morí y renací esa noche, cuando, a oscuras, me robaste el corazón y el alma. 

jueves, 7 de marzo de 2013

220.

Es el momento de sacar la pistola y disparar, de levantar el culo del sofá y salir a protestar. Ahora que nos dan la oportunidad de dar nuestra opinión, de hablar, incluso aunque no nos escuchen y les dé igual. Más nos vale juntarnos y luchar, luchar por nuestros derechos y por nuestros deberes. Parece que no sirve para nada, que jamás conseguiremos lo que ansiamos pero sabéis qué? Si los de abajo nos movemos, los de arriba, se caen.

lunes, 4 de marzo de 2013

219.

 Abracadabra, te quiero. 

218.


Estaban cortando la hierba a unos metros de nosotros y el penetrante olor se mezclaba con el de mi pitillo antes de entrar por mi nariz. El sol acariciaba mis hombros desnudos y mis mejillas ligeramente coloradas. Gracias a esa luminosidad de verano podía ver a través de mis párpados. Era un jueves, o un viernes, no lo recuerdo bien, sobre las diez de la mañana. Tenía la cabeza apoyada en el regazo de una de las mejores personas que he conocido jamás. Amy Winehouse enlatada cantaba desde mi móvil y yo, feliz, empecé a cantar con ella. De un día para otro me quedé sola, y volví a ser la puta que se iba con el primer tío que encontraba porque creía que podía engañarme a mi misma y hacer pasar a esos calentones por hombres realmente enamorados de mi. Volviendo a mi relato de los hechos aquel día acontecidos; me bebía un café frío mientras fumaba y decía tonterías simplemente por hacer reír a Carlos, y sus ojos, habitualmente pardos, rozaban el verde cuando me miraba, girado, y le daba el sol en la cara. Recuerdo también el tacto de sus labios en mi mejilla y su mano en mi espalda cuando empezamos a bailar simplemente porque nos apeteció en aquel momento. Fui feliz. Aquel día, olvidándome por un par de horas de todo, y dejando atrás mis múltiples problemas, me escapé a algún lugar un poco menos malo.

domingo, 3 de marzo de 2013

217.

Y en el rechazo a la sociedad que a su vez nos rechazaba, nació una de las amistades más fuertes de este planeta y un par más. Por la decadencia conjunta y la alegría repentina, que aunque parezca que no, unen. Casi tanto como compartir tarta, cantar canciones juntas y prestar la una a la otra los libros. Puede ser que las tardes de cine, los silencios elocuentes y las palabras calladas, consiguieran unir nuestras almas. No lo sé aún. Pero, después de tantos años de amistad, siendo sincera, lo único que me importa es que esa sentimental y mona bolita de pelo rubia sobre longboard me sigue queriendo. Que siga conservando la saltarina de colores que le regalé en verano, la Vespa de juguete por su quince cumpleaños, cada una de las sonrisas, de los abrazos. Me importa que cuando escucho Pete Doherty, en mi cabeza es ella la que está bailando en su habitación, o leyendo tirada en el sofá. Lo que más me gusta de ella no es su mirada concentrada cuando escucha mis problemas, ni su risa cuando hago una broma, ni la graciosa forma de fruncir el ceño cuando no entiende algo... Aunque esos detalles me pongan de muy buen humor, lo que realmente hace que la adore, es su forma de respetarse a si misma y a los demás, su no-odio, su cariño hacia todo el mundo, su inocencia, que a veces me desespera pero es un rasgo que ojalá persistiera en mi también. Así que si lees esto, H., no hay nadie como tú, ni lo habrá jamás. 
Pdt: Espero que te fijes en que está justificado, porque te parece más mono. Tu lo vales mi pequeña, sonríe hasta que te duelan los músculos de la cara.

miércoles, 20 de febrero de 2013

216.


Soy esa que todos creéis conocer pero que, realmente, ni uno se acerca a hacerlo. Cuando me caigo, me levanto, antes o después pero me sobrepongo, pase lo que pase. Observo a la gente, y me siento realizada cuando me cuentan cosas y los ayudo. Simplemente, no me rindo. Lloro, a veces me enfado y pego puñetazos, me desespero, grito, pero lucho hasta el final. Tengo momentos en los que me viene el mundo encima, en que mis fuerzas flaquean y creo que termina todo, que ya agoté todas las opciones. Podéis pensar que lo hago por mi familia, por mi país o por mis creencias. Pero, si lo hacéis, os equivocáis. Lo hago porque estoy segura de que puedo ayudar a que este mundo no se vaya a tomar por culo. Lo hago porque sé que puedo con todo esto y con mucho más, porque en el fondo, confío en mi y en mis capacidades. Y si se da el caso de que no puedo, lo intentaré igual porque yo, no me rindo. Después de tantos golpes, de tantos insultos, tantas noches amedrentada, sigo aquí; y hoy, 20 de febrero del 2013, os aseguro que no me rendiré jamás, que hasta que me quede sin fuerzas, seguiré aquí para daros de qué hablar, para hacer que os planteéis las cosas una vez más, para poneros las cosas menos fáciles.

viernes, 15 de febrero de 2013

215.


Un colchón en el suelo, montañas de libros, olor a café y a Seven Stars. Y ella sentada en un sillón medio roto, con calcetines hasta la rodilla, mis bóxer y un polo de un equipo de rugby. Leía Murakami totalmente ensimismada. Mientras preparaba tortitas en una cocina aparentemente prehistórica, me quedé mirándola. No era la más guapa, ni la más lista ni la más ordenada, pero lo cierto era que ella encarnaba lo que siempre deseé. La encontré por casualidad, chocamos por la calle y acabamos tomando café juntos. También hicimos el amor en mi piso y cuando me desperté, se había ido. Dejando su número de teléfono en un post-it. Por aquellas, Cali aparecía y desparecía como el humo de su tabaco cuando nos sentábamos en el dique. Ojalá pudiera volver atrás en el tiempo, enmendar mis errores.

Mis disculpas

a esos lectores fieles que durante este mes echaron de menos mis deprimentes escritos, pero tuve problemas con mi ordenador, en seguida tendréis entradas nuevas. Muchos besos discípulos

miércoles, 16 de enero de 2013

214.


Marcas, cicatrices, moratones. Antes de irse, todos me dejan algo de recuerdo. Papá, la nariz, un brazo y tres costillas rotas; mamá, moratones bajo la camiseta; mi entrenador, una marca de toalla mojada en la espalda; los chicos con los que me he acostado, chupones, billetes, una cena en un restaurante caro;  mis ex-novios, CD´s, libros, chapas, un par de camisetas; mi abuela una cicatriz debajo de la ceja izquiera. Y así acabé, con mal sabor de boca. Bebo un trago de whisky y salto al vacío.

martes, 15 de enero de 2013

213.


Me doy cuenta de que me alejo de todo. Lo llaman evadirse de la realidad, yo no le veo nada de malo. Y tampoco lo hago a posta, es que, de repente, veo mi mundo reducido a la música, los libros y los cigarrillos. Paso temporadas enteras en las que dedico todo mi tiempo y atención a leer, escuchar, observar, respirar... Son momentos de reflexión, normalmente sufro de un revés de la vida y a continuación me evado de la realidad, aunque yo prefiero decir que me meto en mi mundo. Poca gente lo entiende ya que no todo el mundo tiene la capacidad de centrarse totalmente en algo. Yo, sin ir más lejos, me distraigo cada dos por tres, aún así puedo meterme dentro de mi burbuja de paz.  Ahora, no paro de leer, de fumar, de observar, de probar comidas nuevas, de salir a correr horas enteras,... Cuando me preguntan algo, respondo de forma concisa, hago los deberes de clase y como lo que me ponen en el plato. Sólo hay una persona que cambia el curso de mi vida, para él siento que no tengo secretos y sé que si me duermo apoyada en su hombro, no me pasará nada malo. De alguna forma, me saca de mi mundo y me mantiene conectada con el mundo real, hace que me sienta viva, es difícil explicarlo y lo cierto es que me faltan palabras para hacerlo, pero yo le quiero, es lo único que sé con certeza. En este momento, es lo único que sé.

domingo, 13 de enero de 2013

212.


Mis venas estaban contaminadas de un amor estropeado, un amor que pesaba como metal en mi corazón y me hundía muy profundo. Que puso en mi vida tanto vaso vacío y tanto cenicero lleno. Y tuve que morir para poder renacer una vez más, y aunque intentaron cortarme las alas, eché a volar.

martes, 8 de enero de 2013

211.

No hay nada mejor que dormir a tu lado.

sábado, 5 de enero de 2013

210.

No sé que fue lo que me infundió valor de repente, pero cuando me di cuenta ya lo había dicho en alto. Solía pensarlo pero jamás lo había dicho, cuando miraba como se retiraba el pelo, como fruncía el ceño cuando se concentraba en algo. La forma en que se abrazaba las piernas cuando estaba triste. El sonido de su risa. Me enamoraba. Cada segundo que pasaba con ella, estaba más seguro. Y después de decirlo una vez, no paré de repetírselo. Cuando le hacía el amor, mientras leía, y me daba igual si ella me quería o no. Porque no había nada mejor que regodearme en ese sentimiento.

209.

Ella sonríe, pero no con los ojos, y tú no te das cuenta porque sólo le miras los pechos. Podrías saberlo todo, podrías cuidarla, pero no te tomas la molestia. La ves cantar, bailar, reír, y crees que es muy alegre, pero no te fijas en que cuando la besas, su boca sabe a marihuana y vodka. No ves que a veces se queda embobada mirando al infinito y que suele estar a punto de llorar. No sabes nada, te crees que te quiere y piensas que eres un afortunado, pero ni siquiera la conoces, y así como vas a saber que no puede amar? La ignorancia es tu mejor amiga, y no te das cuenta de que se está muriendo. O de que, probablemente, ya esté muerta por dentro.

208.

Pensé que dolería, que dolería mucho. Pero no dolió, hasta que fui al baño y me bajé los pantalones. Olía fatal y cuando bajé la mirada vi que mis bragas preferidas, unas blancas con un lacito rosa de Hello Kitty, estaban rojas. No lloré, no me asusté, simplemente me las saqué, me puse unas nuevas y lavé con jabón las otras. Mi madre entró en el baño y se puso histérica, cuando comprendió cogió el teléfono y se lo contó a media familia. Yo leí las instrucciones y me puse un tampón. Estaba cansada, y me daba igual. Hasta me dieron un regalo por ser mujer ya. Lo cierto es que no entendía como se ilusionaba así por algo tan asqueroso. Pensé que dolería, pero no dolió. Y en cuatro días paré de sangrar. No me importó una mierda, pero me habían hecho un regalo, aunque yo seguía siendo una niña. A veces pienso que aún lo sigo siendo, pero quién sabe, a lo mejor Peter Pan es mi padre y conservo sus genes.

martes, 1 de enero de 2013

207.

Y corrí, y corrí, porque no podía echar a volar. Buscando libertad, o felicidad, no lo tengo claro. Viajé de país en país y no me quedé en un sitio más de seis meses, no quise acostumbrarme, ni encariñarme con nadie eso era lo que siempre me traía problemas. No encontré la cura al cáncer, ni la felicidad eterna, y no hice nada digno de mención. No destaqué en ninguno de mis trabajos, bueno, siendo cajera de un súper, fui la empleada del mes, pero no me pagaron más por eso. Pero sí viví la vida que quise, me sentí libre y bien, hubo momentos duros, en los que me invadía la morriña y quería volver a perderme en los bosques verdes que parecían de cuento de hadas. Pero mantuve mis ideas y fui a conocer mundo, recogí mis memorias en una libreta, y no paré hasta que me vi sin fuerzas. Fue en ese momento cuando empecé a recordar y a pensar y me sentí mal por haberme ido de repente, por haber huido cuando todo empezó a ir mal. Y volví, y remendé mi pasado, pedí disculpas y agradecí lo que no había agradecido antes. Me sentí tonta por no haberme dado cuenta antes, pero era tan joven. Y ahora, sentada ante tu tumba, me pregunto por qué me alejé de ti.

206.


He entrado en casa y ha sido como equivocarme de edificio, porque no formo parte de esta familia. Hoy llevo puesta mi máscara de "No me importa nada" pero la verdad es que las cosas duelen, y cada vez más. Y siempre habrá momentos en los que nadie te abrace, ni te apoye, momentos en los que te sentirás caer. Lo sé, pero esto es demasiado. Así que digo "Lo siento, os he fallado una vez más, he notado tu vergüenza al mirarme en el espejo mamá." Pero me siento tan tonta ensuciando las sábanas con mis lágrimas caprichosas de prostituta barata. Cuando decida levantarme, mi maquillaje estará intacto, seré fuerte otra vez o lo fingiré al menos. Me esconderé detrás de mi muro, metida en mi torre de princesa.