miércoles, 7 de noviembre de 2012

189.


No veo amor en tus ojos, sólo tu puta obsesión por controlar todo. Ya no tengo ganas de hablarte, ni de verte, sólo quiero irme. Creo que cualquier día de estos, explotaré y toda la furia que llevo dentro saldrá y te caerá encima, tengo tanto miedo, no quiero hacerte daño. Odio ver cómo abres los ojos, aterrorizada, cuando me enfado y te grito. Quise contártelo todo, quise confiar en ti, romper el estereotipo de relación adolescente-madre y llevarme bien contigo. Pero las palabras mueren en mi garganta, sólo escapo, me alejo de ti. Todos esos planes hechos para dos... Así que cuando me preguntas que tal en clase, digo que bien para que te quedes tranquila y me dejes en paz. Ojalá me abrazaras, volvieras a ser aquella persona amable, accesible y cariñosa a la que yo contaba todos mis problemas. Perdí ya mi esperanza, hace tiempo, ahora tus cosas buenas son sólo recuerdos, sueños inalcanzables.

No hay comentarios:

Publicar un comentario